
GLM – 14
Reportaje
La carrera de un gran artista
Bing Crosby nació el 3 de mayo
de 1903 en Washington. En 1926
publicó su primer disco. Desde
entonces, con un éxito creciente,
continuó una carrera que se iba a
desarrollar hasta el mismo día de
su muerte.
Fue número uno en ventas
en todo el mundo y en su voz se
hicieron famosos temas como
"In the cool, cool, cool of the
evening", "White Christmas", "Blue
Skies", "Where the blue of the
night", etcétera. Grabó más de
1.700 canciones, algunas de ellas
compuestas por él mismo.
Su carrera en cine comenzó con
su participación en cortometrajes
y con cameos en diferentes
filmes; pero posteriormente llegó
a protagonizar 55 películas, 23 de
las cuales ocuparon un puesto
entre las diez más vistas el año en
el que se estrenaron.
Como actor, obtuvo tres
nominaciones para los Oscar y se
llevó una estatuilla en 1945 por
su interpretaciónd el padre Chuck
O’Malley en "Going my Way".
Crosby repitió personaje
en "Las campanas de Santa
María", una de sus películas más
conocidas y en la que trabajó junto
a Ingrid Bergman.
Era, además, amante del
deporte y un gran deportista,
sobre todo, un estupendo jugador
de golf.
En cumplimiento de su fin primordial, la Fundación Bing
Crosby ayudó durante largo tiempo a los caddies. Para ellos
–en los primeros años llegó a haber 90 caddies en el club–
se creó una escuela en la que recibían clases de Educación
General Básica. Además, se colaboraba con sus familias en
momentos de especial necesidad.
Posteriormente, a medida que la figura del caddie fue des-apareciendo,
la Fundación empezó a apoyar a los profesiona-les
que comenzaban a competir, ayudándoles a sufragar los
gastos de viajes y hotel. Así lo recuerda Valentín Barrios: “Se
ayudaba a los profesionales principalmente para que pudie-ran
a asistir a competiciones. Después se instauró la norma
de que, si ganaban lo suficiente en el torneo, retornaban las
ayudas a la Fundación”.
Los profesionales han continuado siendo los principales
beneficiarios de la Fundación, a través de ayudas a la forma-ción,
especialmente en nuevas tecnologías. José Luis Alonso,
que se encontraba entre el grupo de caddies de los primeros
años y que es ahora profesional y director de la escuela de
golf del club, reconoce “la excelente labor de ayuda que du-rante
estos años ha proporcionado la Fundación a todos los
profesionales que la han demandado”.
Un gran torneo benéfico para relanzar
la Fundación
Aquella cantidad de algo más de seis millones de pesetas ha-bría
desaparecido en poco tiempo si no se hubieran realizado
diferentes actividades para recaudar nuevos fondos. Además
de los propios intereses del capital inicial, cada año se orga-nizaba
en el club un pro-am con ese objetivo y, como saben,
la Fundación Bing Crosby pone a la venta lotería de Navidad,
con un pequeño recargo, todos los años. Éstas eran, entre
otras, las principales fuentes de financiación.
No obstante, con el tiempo y, sobre todo, con la limita-ción
de los objetivos planteados en los estatutos originales,
la institución fue quedando relegada y perdiendo su energía
inicial.
El próximo mes de octubre se cumplen 40 años de la crea-ción
de esta Fundación y el club se ha propuesto relanzarla
y convertirla en el camino lógico y coherente de encauzar su
responsabilidad social corporativa y convertirla en un ins-trumento
valioso para la sociedad. Por eso, nuestros aboga-dos
están trabajando para adecuarla a los nuevos tiempos y
para reorientar sus objetivos.
Una vez que esta revisión haya culminado, el club planea
organizar un gran torneo benéfico (se informará de la fecha
concreta), en colaboración con el Ayuntamiento de Alcoben-das
y con grandes empresas de la zona. Será el acontecimien-to
que marcará el relanzamiento de la Fundación y durante
su celebración se descurbrirá un monolito ubicado en el lu-gar
en el que falleció el artista.
“Queremos que el homenaje del club a Bing Crosby se
plasme en actos concretos en beneficio de nuestro entorno
social más inmediato. Exactamente lo mismo que el cantan-te
hizo a través del pro-am que puso en marcha en California
en 1937”, concluye Manuel Diego, director general de Golf
La Moraleja. “Por eso, en colaboración con el Ayuntamiento
de Alcobendas, donde está ubicada nuestra sede principal,
acordaremos con ellos el destino de los fondos recaudados”.
La intención es repetir anualmente un torneo de caracte-rísticas
similares, así como otras actividades, que ayuden a
dar continuidad a esta iniciativa tan apreciada y tan consus-tancial
a la propia historia de Golf La Moraleja.
——Una foto para el recuerdo. Bing Crosby, César
de Zulueta, Manolo Piñero y Valentín Barrios posan
juntos momentos antes del partido. La imagen la ha
rescatado de su álbum personal Valentín Barrios.